Alzheimer y células madre.

El mal de Alzheimer no tiene por qué ser parte del envejecimiento. Entérese cómo las células madre pueden ayudar.

Los poetas y los artistas son los genios que se adelantan a la ciencia. Ya lo decía Sigmund Freud, el padre de la psicología, al hablar sobre la psicología femenina. Afirmaba algo así como: hasta aquí puedo llegar, lo demás que desea saber le recomiendo consultar a los poetas y grandes escritores, ellos lo ayudarán a conocer más profundamente la psicología femenina.

Un gran artista, Joan Manuel Serrat cantaba:

«Uno se cree que las mató el tiempo y la ausencia, pero su tren vendió boleto de ida y vuelta…son aquellas pequeñas cosas que nos dejó un tiempo de rosas, en un rincón, en un papel o en un cajón….»

Ese himno de belleza a los recuerdos, algo que nos traslada a los momentos hermosos y tristes de nuestra vida, a esas PEQUEÑAS COSAS que solo cuando las perdemos nos damos cuenta que pequeñas no son, ni lo serán jamás.

El Alzheimer es una enfermedad cerebral que causa pérdida de la memoria y altera el comportamiento, la forma de pensar y el carácter. Por esta razón, se le llama el ‘borrador de recuerdos’. Esta enfermedad no es una proceso normal del envejecimiento.

El Alzheimer empeora al pasar el tiempo. Otros síntomas son confusión, desorientación en lugares conocidos, colocación de objetos fuera de lugar y problemas con el habla y la escritura.

Hoy en día, se estima que 5,1 millones de personas en los Estados Unidos tienen la enfermedad de Alzheimer y que esta cifra aumentará a 16 millones en el 2050. Debido a que un setenta por ciento de las personas que padecen Alzheimer viven en sus hogares, el impacto de esta enfermedad se extiende a millones de familiares, amigos y cuidadores.

Los diez síntomas del Alzheimer

  1. Pérdida de memoria. Es progresiva y generalmente la persona olvida situaciones completas, olvida o cambia de identidad a familiares (al hijo/a lo llama esposo/a).
  2. Se complican las labores cotidianas. Completar actividades rutinarias, como preparar una comida, hacer una llamada telefónica o participar en eventos familiares (cumpleaños).
  3. Problemas del lenguaje. Olvida palabras simples o las sustituye por palabras inapropiadas o desconocidas. Es posible que no encuentre su cepillo de dientes, por ejemplo, y en cambio pide “esa cosa para mi boca”.
  4. Desorientación de tiempo y lugar. Puede perderse en la misma calle donde vive, no saber dónde está, ni cómo llegó allí, y olvidar el camino de regreso a la casa.
  5. Falta del buen juicio. Las personas con Alzheimer pueden vestirse inapropiadamente; ponerse un abrigo en pleno verano, por ejemplo, o poca ropa cuando hace frío. Es posible que no tomen buenas decisiones con respecto a cómo manejar el dinero u objetos, regalándolos a personas desconocidas.
  6. Dificultades para realizar tareas mentales. Se confunde fácilmente al pensar en cosas abstractas. Es posible que olvide completamente el significado de los números o cómo se usan.
  7. Colocación de objetos fuera de lugar. Guardan cosas en lugares poco comunes. Por ejemplo, la pecera en el refrigerador o un reloj en la azucarera.
  8. Cambios de humor o comportamiento. Presentan cambios repentinos de humor como de felicidad a enojo o de pasividad a agresividad sin razón aparente.
  9. Cambios en la personalidad. Presentan cambios drásticos en la personalidad. Pueden confundirse, sentir temor y desconfianza o depender mucho de un miembro de la familia, al cual identifican erróneamente.
  10. Pérdida de iniciativa. Pueden volverse muy pasivas y sentarse frente al televisor por horas sin realmente poner atención a lo que están viendo.

Tratamiento médico

Actualmente, el tratamiento médico disponible para tratar el Alzheimer no es beneficioso para estos pacientes y posiblemente solo disminuya la progresión de la enfermedad.

Células madre y el Alzheimer

Las Células madre obtenidas de la grasa del mismo paciente (autólogas) han abierto una nueva puerta para conquistar la enfermedad del Alzheimer porque logran transformarse en el tipo de células que el paciente ha perdido. Esto no solo suprime la muerte (apoptosis) de las neuronas del cerebro sino que además logran un efecto preventivo y terapéutico contra la enfermedad de Alzheimer.

Testimonio de la enfermedad de Alzheimer

Paciente femenina de 73 años acude a consulta porque hace dos años la familia refiere que se le olvidan dónde deja los objetos frecuentemente, no reconoce a los familiares, no participa en festejos familiares, tiene ansiedad moderada, cansancio durante el día y es diagnosticada con Alzheimer.
Le realizamos la Escala de deterioro global para evaluar aspectos como la memoria, la percepción y la resolución de problemas (alteración cognitiva)–edad-dependiente, y se encuentra en un estadio 3.
En julio de 2014 se le realizó el procedimiento con células madre. Al cabo de los cuatro meses, la paciente expresa sentirse mejor, presenta más concentración para hacer las labores del hogar y siente más energía. Al realizar nuevamente la Escala de deterioro global, la paciente se encontraba en un estadio 2 lo que implicaba que había mejorado considerablemente. La familia también expresó que la paciente había recuperado el déficit de la memoria, estaba menos ansiosa, festejaba cumpleaños y recordaba a los familiares aunque todavía ocasionalmente olvidaba dónde guardaba los objetos.
Las células madre tal vez no son la cura para la enfermedad de Alzheimer pero los pacientes muestran una gran mejoría y retornan a su vida cotidiana.
Dr. Álvaro Skupin

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